Jugando bien, con control de balón, desbordando por las bandas, Salcido con un gram juego, Barrera demostrando que podría jugar en Europa, Guardado y Chicharito desde el principio, pero Argentina venció 3 por 1 a México y lo eliminó, en el cuarto juego, del Mundial de Sudráfrica 2010.
La ilusión terminó, no sólo para los jugadores, sino para los más de 25 mil mexicanos que viajaron desde diversas partes del mundo a esta sede, para los medios de comunicación nacional y para todo aquel directivo que confiaba en el Tricolor para llegar a los cuartos de final.
Sí, se jugó bien... pero eso no es suficiente para meterse entre los grandes, no fue necesario que Argentina jugará bien, Lionel Messi se perdió en la medida cancha y adelante, pero Argentina hace algo que a México le cuesta mucho trabajo: CONCRETAR las pocas llegadas que fabrica.
El Apache Tévez se convirtió en el verdugo de los aztecas al marcar en dos ocasiones y el árbitro italiano (o más bien, su juez de línea) colaboraron a que la puerta se abriera, aunque el error del silbante fue lo de menos, ya que México no supo sobreponrse y mientras los jugadores se quejaban en la cancha, llegó el segundo gol.
México dominó, quizá en todas las estadísticas, menos en la que cuenta, el marcador, y mientras eso siga sucediendo, mientras controlen el juego, mientras toquen el balón, mientras se quieran seguir metiendo hasta la portería con balón controlado, no van a pasar de eos octavos de final en alguna justa futura.
Se aplaude la intención. México, no jugó mal; por momento fue quien definió el rumbo del partido, pero eso no importa cuando los de enfrente tienen cinco opciones y meten tres goles.
Un error fue el encargado de que Argentina encontrara el camino de la victoria, cuando al minuto 25 costó el 1-0, cuando Carlos Tévez recibió un pase en claro fuera de lugar. Pero el gol no sólo desequilibró el marcador, sino también a los verdes, quienes venían jugando muy bien.
Pero no hay que criticar, México marcó un tanto en fuera de lugar ante Francia, y ahí no nos quejamos, ¿cierto?
Apenas 7 minutos más tarde, el goleador del torneo, Gonzalo Higuaín, marcó tras un grave error de Ricardo Osorio, quien trató de regresar el balón al Conejo Pérez de mala forma, para el remate final del argentino.
Ya para la segunda parte, no sin antes registrarse un conato de bronca dentro del túnel de acceso a los vestidores, en el cual jugadores de la banca argentina se burlaron de los mexiacnos, quienes respondieron a empujones, México siguió dominando, pero sin poder anotar.
Y llegó la genialidad de uno de los delanteros más dinámicos del mundo, Carlos Tévez, quien sin pensarlo demasiado tomó el balón en tres cuartos de cancha, lo llevó con soltura y tras levantar la cabeza, metió un diasparo enorme a la esquina de la meta mexicana, en donde el Conejo, no pudo hacer nada, para el 3-0.
Cerró la cuenta Chicharito Hernández en otro gran gol de media vuelta a los 70, pero ya era demasiado tarde para el conjunto de Javier Aguirre, quienes, una vez más, se quedaron fuera del Mundial a manos de los sudamericanos.
En síntesis, México no cumplió con lso objetivos planeados, no llegó al quinto juego, no presentó NUNCA una escuadra titular que repitiera partido tras partido y por si fuera poco, dejó en claro que los naturalizados no son necesarios si juegan como El Guille Franco.
Se acacbó la esperanza, se acabó la ilusión y como cada Mundial los mexicanos tendremos que escoger a otro equipo para seguir disfrutando de la Copa del Mundo, porque México no puede y después de formar un cuadro de buenos jugadores, no podrá, cuando mneos en otros cuatro años.
Ahora Argentina se medirá ante Alemania en los cuartos de final.
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