Por: Héctor Aguilar, / Informativo Anáhuac. Foto: yahoo.com
México ha realizado un buen Mundial de Fitbol. Empató con Sudáfrica en el siempre importante debut, y venció con categoría a Francia, ahora viene Uruguay, pero... sus fantasmas siguen rondando.
Primero la suerte. Efecto que por fin se voletó de su lado y les permitió anotar un gol en aparente fuera de lugar y un penal no muy claro, pero ¿a quién le importa? Ganaron y eso fue lo importante.
México se enfila a los octavos de final como cada Mundial, cuando menos atención tiene siempre termina colándose a la fiesta de los 16 mejores equipos del planeta.
No obstante, dos de sus rivales, con quienes históricamente ha tenido problemas y sufrido derrotas muy dolorosas se vislumbran a lo lejos, pero el tiempo siempre llega y Argentina y Estados Unidos podrían enfrentarlos si los planetas se alinean.
México podría enfrentar a Argentina en caso de que los verdes terminen en el segundo sitio del sector A, ya que Argentina tiene casi asegurado el primer lugar del Grupo B.
Los aztecas los evadirían si vencen a Uruguay, de ahí la importancia del último juego del sector, ya que en caso de terminar con el lierato enfrentarían al segundo lugar del Grupo B, que podrían ser Corea del Sur o Grecia, rivales no tan complicados como los sudamericanos.
En caso de pasar a la siguiente ronda el ganador de este juego se medirá contra el vencedor del juego 3, el cual enfrentará al líder del sector C con el segundo sitio del grupo D; es decir, si Estados Unidos termina en primer sitio de su sector (C) y vence a Ghana o Alemania (D), enfrentará a los mexicanos, en el famoso quinto partido y en lo que sería una revancha por aquella eliminación en Alemania 2006.
Así que México no tendrá fácil el camino, pero para considerarse como un equipo ganador debe imponerse a sus vencedores históricos, aunque si los puede evitar sería mejor.
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